Mindfulness en la Expatriación. Una mirada compasiva
Creo que una de las
realidades más complicadas de la vida del expatriado es la sensación de
soledad. Frecuentemente, dejar en tu país de origen a tu familia y amigos implica
que, por primera vez, no tenemos el mismo círculo de apoyo cercano. Puntualmente,
las videollamadas y los mensajes instantáneos ayudan a mantener el contacto con
nuestros seres queridos, pero no sustituyen la presencia física. Y ésto a veces
duele.
El otro día leí: “En
lugar de ver esta soledad como un obstáculo, piensa que también puede convertirse
en una oportunidad para redefinir lo que significa hogar”. Me encantó la
frase. Creo que el hecho de no estar atados y enraizados a un lugar concreto o a
una comunidad específica, nos da la libertad de crear nuevos
lazos y conexiones, de crecer a través de nuevas experiencias y de reinventarnos.
Mudarse a otro
país es una de las decisiones más transformadoras que uno puede experimentar. Para
muchos, ser expatriado no es sólo un cambio de país, sino un viaje a tu YO mas íntimo. Al principio, la idea de empezar de nuevo en
un lugar desconocido puede ser abrumadora, pero conforme pasa el tiempo, esa
experiencia también puede ofrecer lecciones valiosas y sabias sobre uno mismo, el entorno y sobre cómo nos conectamos con los demás.
Ser expatriado es
una experiencia enriquecedora y a su vez desafiante. La práctica de Mindfulness, en mi caso, se ha convertido en una técnica esencial para navegar este viaje personal. Me enseña que,
aunque no siempre podemos controlar lo que ocurre a nuestro alrededor, podemos
elegir cómo estar y responder desde adentro.
A quien esté en
este mismo camino, te cuento: No tengas miedo de detener(te), respirar(te) y
escuchar(te). En esos pequeños momentos de atención plena y compasiva, encontrarás
un refugio amable, un lugar sereno que siempre estará contigo, sin importar el lugar del
mapa en el que te encuentres.
Porque al
fin y al cabo, tu verdadero hogar no se encuentra en un punto geográfico estático, sino en cómo nos
encontramos y sentimos a nosotros mismos en cada paso del camino.
Que estés bien. Con cariño.
IM PSICOLOGÍA